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Cano y Kennedy marcaron los tantos de la victoria ante Boca Juniors en la final.

Fotografía: @Libertadores en Twitter

Fluminense derrotó este sábado 2-1 a Boca Juniors en un Maracaná copado de público y consiguió su primer título en la Copa Libertadores de América.

Las lágrimas de Diniz y sus dirigidos representaron el esfuerzo que hizo el cuadro brasileño durante los 120 minutos de la contienda en una final exigente ante un Boca que buscaba su séptimo trofeo en la máxima competición de Sudamérica.

El marcador se abrió al minuto 36 por cuenta de Germán Ezequiel Cano, quien demostró una vez más su habilidad de finalizador en el área. El argentino llegó a 13 tantos en la Copa y se aseguró como el máximo goleador de la competición.

Ya en el 72’, Luis Advíncula decretó la paridad con un gran remate desde afuera del área. El tanto del defensa mandó el partido al tiempo extra y aseguró así que ninguna llave de Boca Juniors en el presente torneo se definiría en los 90, pues las anteriores se concretaron en la tanda de penales (octavos, cuartos y semifinal).

Cuando transcurrían 101 minutos y se acercaba el final de la primera parte del alargue, John Kennedy cazó un balón de Keno y marcó un golazo para devolverle la ventaja al Flu. Sin embargo, en la eufórica celebración con la afición recibió la segunda amarilla y salió expulsado del compromiso.

Fluminense se veía obligado a jugar con uno menos el resto de la prórroga, pero Frank Fabra golpeó a Nino al 105’ y fue expulsado con roja directa por Wilmar Roldán.

El marcador no se movió más y el tricolor conquistó la primera Libertadores de su historia, dejando atrás la final perdida de 2008 ante Liga de Quito.

El cuadro brasileño, además, se aseguró en la Recopa Sudamericana donde se medirá justamente ante Liga de Quito y en el Mundial de Clubes que se realizará en diciembre.